¿Cómo podemos garantizar la confianza y la transparencia en un mundo cada vez más digital y conectado?
A medida que el mundo se digitaliza, los procesos de identidad también deben ser digitales con el fin de que las personas jurídicas sean capaces de crear confianza sin necesidad de la intervención del ser humano. No hay tiempo que perder: la confianza en la autenticidad digital escasea.
Consciente de esto y de que los beneficios para el conjunto de las comunidades empresariales aumentan en línea con la creciente adopción del IPJ, la GLEIF ha evolucionado y ha tomado un nuevo rumbo estratégico: impulsar la adopción del IPJ por parte de las personas jurídicas de todo el mundo y fomentar una utilización voluntaria más amplia de los IPJ más allá de los usos que exige la legislación. Y lo hará de forma que posibilite una entidad global, proteja la confianza y fomente la transparencia en una economía global que se digitaliza a pasos agigantados.
Si bien la visión de la GLEIF sigue siendo la misma («una identidad global para cada empresa»), la organización se encuentra inmersa en un proceso de transformación como respuesta a este nuevo rumbo. Está expandiendo sus horizontes más allá del uso regulado del IPJ y profundizando en su compromiso de ayudar a las empresas a comprender cómo puede el IPJ aportar una mayor confianza, eficiencia y transparencia a cualquier sistema de gestión identitario en cualquier sector, ya sea en línea o fuera de ella.
Con el objetivo en mente de ayudar a contar la historia de cómo las tecnologías están transformando la forma en que las personas, las empresas y los gobiernos deciden cómo interactuar y confiar, la GLEIF se ha sometido a su propia transformación. Consciente de todo esto, la fundación ha modernizado la forma en la que se presenta ante el mundo. Como custodio oficial de los registros y la red subyacente que hace posible interacciones responsables entre personas jurídicas de todo el mundo, la GLEIF necesitaba una identidad de marca limpia y renovada, incluido un logotipo y un eslogan nuevos, que permitiera reflejar la diversidad y aplicabilidad universal de la organización tanto en el mundo digital como en el mundo desconectado. Si bien es posible que las características externas de la identidad de la GLEIF hayan cambiado, el objetivo principal de su misión siguen siendo el mismo: crear una confianza duradera y verificable entre las personas jurídicas de todo el mundo.